La caza y la persistencia
Sobre una humilde caza creativa.
Llevo unos meses dedicado —entre otros proyectos1— a la escritura de una historia2 que empezó como un microrrelato. Quería ser un cuento, rechazó ser una novela. Algunas ideas son así.
En cualquier proyecto (creativo o no) hay un momento en el cual se empieza uno a plantear si realmente merece la pena el esfuerzo, si realmente yo puedo, si…quién me mandaría a mí. O empiezas a perder el empuje inicial. Es normal.
Austin Kleon lo llama la oscura noche del alma3
Pues bien, hace unos días escuchaba un audiolibro de David Attenborough, basado en su serie documental David Attenborough's Life Stories. Hablaba sobre la caza de una tribu del desierto de Kalahari. Incluyo un vídeo debajo que sirvará como referencia.
Encontré una analogía entre la aventura de crear algo y esta caza ancestral.
Tenemos a nuestro cazador, Karohe, que parece incansable al principio. Tiene su momento de recobrar fuerzas (3:35).
¿Debería descansar momentáneamente de este proyecto? ¿Dedicarme a otra cosa por un tiempo?
Luego pierde a la presa momentáneamente (04:18), y en paralelismo con la escritura, se pone en el lugar de su presa (04:24).
¿Qué haría mi personaje? ¿Qué diría? ¿A dónde va esta historia?
Finalmente, en esta ocasión, la presa colapsa exhausta.
Empiezo a tener más clara mi idea, mi propósito. ¿O habré escuchado finalmente a la idea que me hablaba bien claro?
El cazador mira la presa antes de arrojar su flecha (05:40) ¿con lástima?
¿No se siente algo de vacío cuando se da por finalizado una obra artística?
¿No parece como se abandonan los personajes?
El cazador rinde homenaje a la presa (06:17), a su coraje y fuerza.
Se produce una comunión entre el cazador y la presa.
Por ahora sigo corriendo tras mi idea. Eso sí, antes estaba muy lejos y ya empiezo a verla más cerca (incluso sin gafas). Como si me dejara acercarme. Si todo va bien, compartiré los frutos de esta caza creativa a finales de año.
Gracias.
Ismael
Cosas veredes ;)
Jeshi se llama por ahora.
No sé si habrá leído a San Juan de la Cruz, pero sí tiene alta opinión del Quijote